Para evitar escribir el poema que les comparto a continuación me preparé un café muy fuerte, después encendí un cigarrillo (que ni siquiera pude terminarlo), cepillé mis dientes al menos 3 veces, y tiré gotitas de un limón en mi lengua... pero no pude distraerme, no pude esquivarlo, no pude evitarlo... y aquí está... otro poema para vos. Me mudé lejos de nuestra antigua casa, Ésas paredes se han convertido sólo en eso, En paredes. Puede que aún alberguen algunos recuerdos, La mayoría de ellos lucho por olvidarlos. Me he venido lejos de ella, lejos de ti. Ahora cuando abro las ventanas Huelo el perfume de los jazmines. ¿Todavía regalas jazmines a las mujeres que amas? Puedo recorrer en paz el jardín, Ensimismarme con el pasto verde. Encontré el refugio perfecto de algunos cuentos, El que me contabas a mí, por ejemplo. Y acá todo transcurre en un modo distinto. Por esta zona no sabemos del tiempo. Acá, existe –claro- como en todos lados. Pero existe por cuenta ajena. No corre, aquí...