Espejito,espejito

-Nunca me había imaginado otro final para este cuento. ¿Hay tantas brujas disfrazadas de princesas?

-¿Qué hacés aquí? ¿Estás borracho?

-¡No me hablés! No me hablés y dejáme decirte todo lo que siento. Yo no me hubiera imaginado nunca otro final, menos uno tan trágico, tan fatídico. Sos un final siniestro, ¿sabés?

-Mirá, no sé de qué hablás. Voy a llamar a la policía.

-De sentimientos hablo. Pero claro que no sabés, si vos no tenés eso. Por lo menos no tenés sentimientos buenos. Sos, en todo caso, un monstruo disfrazado de codorniz. Te veo ahora, y tiemblo. Se me revuelve el estomago de saber que una vez sentí amor por alguien tan perverso.

-¿Perverso?

-Te imagino sí, te imagino. Puedo hacerlo. Alardeando de tu tiempo que no pasa, de cómo tu piel no envejece. De lo llamativa que te queda la boca con el labial rojo pero yo a vos te conozco sin maquillaje, a vos te dieron las doce hace mucho tiempo. No sos ni cenicienta, ni hada madrina, ni calabaza ni rata de alcantarilla. Te creíamos, te lo juro. Te creíamos Blancanieves o una Alicia en el país de las Maravillas, y resultaste ser la bruja, el ogro, la peste, el odio.

-Parece que conmigo siempre te sale un poeta de adentro. Como cada día 6…. ¿no?

-Te imagino, te decía. Puedo hacerlo. Jactándote de tu obra maestra, inventando, mintiendo, difamando. Te imagino ahora, y te creo capaz de reírte de los enfermos, de burlarte de los muertos, de creerte poderosa y mágica en este mundo real que, según vos, es injusto. Pero dejáme decirte algo… a todos nos toca nuestra parte. ¿Te sentís bien haciendo tanto mal? Al fin encontrás algo que te sale bien, ¿no? ¿Querías éxito en algo? Ya lo tenés.

Se encoge de hombros, y sonríe. Entra a la casa, cierra la puerta con llave.

-Le hablo a la puerta si querés, que es de madera, mejor que vos. Vine a decirte que arruinaste el mejor de mis cuentos. Que te quise, como nunca nadie quiere. Que te hubiera querido por siempre, que no me hacía falta verte para desearte felicidad, que estés bien, que seas alegre. Que te conocí sin máscaras, sin maquillaje, a cara lavada con el alma en pena. Yo te encontré en pedazos, ¿te acordás? ¿quién te armó de nuevo? ¿a quién le hablaste de señales? ¿te acordás de esos versos tuyos sobre soñar a alguien toda tu vida y que conociste al verme? Basura… todo es basura, se acabó Cortázar para mi, ya no duerme más el sapito contento. ¿Por qué no te gusta diciembre? ¡Decime! No te gusta diciembre porque en diciembre la vida te arrebató a alguien a quién vos querías. ¿Y aún así sos capaz de reírte de las pérdidas ajenas? ¿Pensás que yo no tengo memoria? Yo te rompí el corazón porque el mío ya estaba roto, pero ahora mi corazón para vos está muerto. Este final de esta historia de amor resultó un cuento oscuro, como vos. Quedáte con eso… mi más sincero rechazo a todo lo nuestro. No te conocí, no te amé y no te voy a recordar nunca más. Vos si estás muerta, más muerta que todos los muertos. Sos de esos muertos olvidables que se los traga el tiempo, nadie le lleva flores a tus gusanos, sos materia podrida, no más que eso.